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Alguna vez escuché a mi papá decir en una reunión con sus amigos que «macho que no jotea, no es macho.» Frase que recuerdo cuando cualquier hombre se presenta como 'soy muy masculino'; creo profundamente que todos somos tan hombres (y tan nenas) como querramos sentirnos ¿no? Independientemente de a quién, qué música o a qué rol nos sintamos atraídos. Los gustos gay en los hetero son mi punto hoy. Una tía mía de mentalidad muy conservadora cuando niño vigilaba mis ademanes. Pero hasta la fecha ama al Divo de Juárez, Juan Gabriel. Hace menos tiempo supe de la admiración de un amigo hetero por él; qué bueno que no se censuren de disfrutar lo que realmente disfrutan.
¿Les pasó que en bachillerato o secundaria, sus compañeros más bugas jugaban muy pegados entre ellos? Luchitas, revolcones y repegones. En mi bachillerato, éstos estereotipos de chicos heteros jugaban a bajarse los pantalones, la ropa interior, voluntaria o involuntariamente para exhibirse, darse besitos de piquito con vidrio en medio, hacer voces femeninas; vamos, hasta uno de los más galanes me agarró la entrepierna más de una vez. Tenían éstas actitudes a la vista de todos, con bandera de buga. En otros grupos había quienes corrían tomados de la mano, en la hora del receso, de 14, 15 años. Cabe decirse que todo esto ocurrió en un colegio dirigido por religiosas: Oro puro.
La miss de jotería cerraba su segmento diciendo «todos llevamos una jotita por dentro» Muchas cosas nos programan a verlas negativamentes, dentro de un solo contexto. Pero, también hay quiénes disfrutan sin preconcepciones. De viaje, un amigo me invitó a ver los episodios de 'Sex and the City' que tiene su hermana; él como otro de amigo, se sabían las líneas de Samantha, Carrie y Miranda, fue muy divertido para mi, puedo ser más abierto sobre mis gustos con ellos. Otros amigos, me compartieron un vídeo parodia del videojuego Bayonetta, donde el pornstar Billy Herrington imitaba sus escenas de acción al son de la versión dance de Fly Me to the Moon. Ubican a Billy por nombre y ocupación. ¡Ah! también se saben la trama del cómic homoerótico de Josman 'My Wild and Raunchy Son'.
¿Qué más para decir? Todos tenemos anécdotas sobre los amigos que se dieron beso pero no se gustan realmente, etcétera. Me encantan estos ejemplos porque van con lo que pienso: Unirnos por lo que tenemos en común que dividirnos por las diferencias.
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