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Todo apunta a que el Super Bowl XLVII no solo nos dió una gran presentación de Beyoncé y el resto de las Destiny's Child, pero además al galán profesional Mario López, quien perdió una apuesta contra su co-anfitriona Maria Menounos. Dicha apuesta la pagó corriendo por las calles de Los Ángeles sin usar nada más que tenis, un casco de los Ravens y por supuesto uno de los boxer briefs de su marca Rated M.


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