Contacto: augusto@lofttampico.com
1. Ratos breves pero frecuentes. Momentos de concentración repetidos frecuentemente son mucho más efectivos que una larga sesión de estudio que causa fatiga y distracciones. Estudia 10 minutos, tomar un descanso de 2 o 3 y luego volver a estudiar otros 10 minutos. Cuando aprendes algo nuevo, trata de seguir de nuevo los puntos aprendidos el mismo día. Además, agéndalo periódicamente a diario, cada segundo o tercer día, como si fuera una cita.
2. Toma en cuenta tu estado emocional. Cuando el cerebro está relajado, es cuando absorbe la información sin ningún esfuerzo. Busca cómo llegar a las condiciones en las que estés relajado y diespuesto. ¿Necesitas una luz especial, silencio, música, privacidad, comida? Presta atención en lo que funciona para ti y repítelo cada vez que estudies para obtener un mejor resultado.
3. Secuencia natural de aprendizaje y exageración. Cuando estudias, si tratas de entender el concepto general y luego te vas con los detalles, es más probable que lo asimiles más rápido y mejor. Además, sirve mucho exagerar aspectos importantes o claves del tema o concepto; asi enfatizas lo que mas importa para recordar el resto.
4. Metas razonables. Si quieres lograr una meta muy alta es mejor que antes de esa te prepares para otras más pequeñas, manejables, que crean el hábito de lograr metas y organizar prioridades. Las metas altas, sin perspectiva solo provocarán frustraciones y confunsiones. Un buen ejemplo de metas razonables es seguir los tres tips anteriores.
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario